Belial.
Apareciste en nuestras vidas de repente, sin esperarlo y sin yo saberlo, justo en el momento en el que más te iba a necesitar, “mi ángel de la guarda”.
Gracias por tu amorosa mirada, por tus ronroneos, por tus besos, por tu compañía y por tanto amor, sin pedir nada a cambio, sólo amor.
¡¡Siempre en nuestros corazones, te quiero mi princesa, mi bebé, nunca te olvidaré!! ❤️