Me da miedo todo lo que hay alrededor de la muerte sea de quien sea.
Ante la opción que me ofrecieron de asistir, antes de la cremación, para pasar unos minutos con mi perrillo dije que no, pero al ser la única opción de que estuviese con nosotros lo antes posible, nos acercamos y estuvimos con él para, ahora si, darle el último adiós. NUNCA, nunca me arrepentiré. Todo muy cuidado para que no te afecte, mucha intimidad y todo muy limpio, tanto es así que el lugar no da la sensación de ser lo que es. La carta de despedida muy emotiva. Gracias por vuestros servicios, no debe ser facil trabajar en ese mundo y hacernos sentir reconfortados en esos momentos. Familia de BEN