Cairo

Cairo 23.04.2007/12.02.2017“Lo siento mi Pequeñín, ¡si supieras cuanto lo siento! Por mucho que luché, no pude hacer nada por ti… daría mucho y más para tenerte entre mis brazos y decirte que no te preocupes, que la terrible enfermedad que padecías tenía cura. Rebosabas de vida mi Cairo, eras un gatito tan feliz, tan sutilmente delicado hasta cuando te volvías cantarín por las noches. Me robaste el corazón cuando te vi por primera vez, corazón que la vida acaba de romper en mil pedazos. Un frío y lluvioso domingo de febrero, un último acto de amor para liberarte de tu sufrimiento y devolverte todo el cariño que me brindaste estos últimos diez años. Una última mirada a esos ojos tuyos tan bonitos y tan profundos, a esa carita tuya tan angelical, un último «te quiero con toda mi alma» y te marchaste tras un último suspiro hacia el Puente del Arco Iris, dejando detrás de ti el más cruel de los vacíos. Una puerta se ha cerrado, y tras ella solo existen el frío y el silencio. La vida da y la vida quita, Y aunque ya no estés a mi lado, quiero darte las gracias, gracias por todos estos años de amor, de ternura, de risas, de momentos tan dulces acurrucados el uno contra el otro mirándonos, eras tú, era yo,, éramos nosotros hablándonos con la mirada, sin necesidad de hablar. Te quiero mi Enano… estés donde estés, espero que seas feliz y que nunca nos olvides, yo jamás te olvidaré.”