Tengo que reconocer que a ti te gustaría que no llorase y que estuviera sonriendo porque en cuanto me veías triste venías a mi para darme lametones y me dabas tu patita para consolarme… Pero llevo 3 días de mucho dolor… El día que te fuiste fue uno de los peores de mi vida… Y nada más que han pasado 3 días… Después de 13 años inseparables, me enseñaste a querer sin condiciones, me enseñaste el significado de la fidelidad, y me enseñaste taaantas cosas mi Kuni… Que en tú partida te has llevado ya lo que me quedaba de mi 💔 quien te ha conocido sabe perfectamente que no ha sido fácil estos 13 años… Muchas operaciones… Muchos cuidados.. Muchas noches sin dormir… Hasta tal punto de obsesionarme por todo contigo para que tu tuvieras una buena vida y fácil de llevar… Y así ha sido… Desde que te tuve en mis brazos con dos meses te cuidado hasta tu último suspiro… tu mirada me lo dijo… El día que partiste… Y yo aferrada a ti no aceptando que ya llegaba tu hora… Te tuve que decir adiós… Fue uno de los días más dolorosos de mi vida.
Las personas que nunca han tenido mascota no pueden entenderlo, pero tú, sin ni siquiera poder hablar y poner palabras a tus sentimientos, me demostraste cada día de tu vida lo mucho que me querías. Y no era un amor cualquiera. Se trataba de un amor puro, de los que no duelen, de los que solo entregan sin esperar recibir nada a cambio… Me siento tan afortunada de haberte tenido en mi vida 13 años… Y estoy rota de dolor pero a la vez feliz por haberte dado una vida plena de cariño y mucho amor…
No me olvides nunca… Yo no te olvidaré jamás… Mi Kuni… 💔