Los cuatro meses que has estado a nuestro lado han sido un regalo, el más bonito del mundo.
Ojalá siguieras aquí, subiéndote en nuestros hombros para echarte la siesta y mordisqueándolo todo. Ojalá pudieramos verte crecer y tenerte aquí muchos años.
Con tus patitas pequeñas has dejado una huella imborrable en nuestra familia. Te vamos a querer toda la vida.
Hasta siempre, pequeña. Irene, Andrea, mamá y papá. ❤️