Félix

Fueron solo 134 días, suficientes para llegarnos tan hondo, insuficientes para hacerte lo feliz que merecías. Nos supieron a poco, querríamos haberte dado más de todo. A pesar de todas las enfermedades que tenías conseguiste sacar un poco de tiempo para jugar, para ver la tele y para cazar serpientes de ojos rojos. Pero intentamos quedarnos con lo bueno, a pesar del vacío que has dejado. Echo de menos tu carita y tu carácter bonachón, glotón. Verte jugar era lo que más feliz me hacía, tú estabas alegre, yo sonreía. Siempre estarás en nuestros corazones, jamás te vamos a olvidar. Al final te libraste de ser peinado como un león. Espéranos pequeño Félix.

TE QUEREMOS