Pinky

Llegaste a casa muy pequeña para darnos casi 18 años de innumerables momentos alegres. No poderte abrazar cada día, o ver tus alegres orejillas se hace muy difícil y tu pérdida no se puede superar. Creaste una leyenda en nuestra casa y ahora que no estás solo te pido, por favor, que no dejes de ser parte inseparable de nosotros.Gracias por hacer nuestra vida más feliz y por engrandecer nuestro corazón. Hasta siempre, Pinky…