REX

Mi querido Rexik. Mi amigo fiel. Ha pasado 2 años desde que tu marchaste  para siempre. Me duele el alma y creo que me va doler mucho tiempo. Te echo mucho de menos. Cada vez cuando voy por las calles de mi barrio me recuerdo de nuestros paseos por la noche. Salen lagrimas por si solas. Me recuerdo de muchas cosas buenas que hemos vivido contigo. Tu vida ha sido muy dura. Pero gracias a Dios, hemos podido conocerte y compartir nuestras vidas contigo. Siempre estarás en nuestros corazones. Y siempre te voy a extrañar. Gracias por todo.